Lloras porque te desborda lo que creés que no mereces.
Y así vas quitándote los amores y poniéndote los miedos.
Y lloras porque no querés creer que es así, porque lo ves en otros
y no podes verlo en vos.
Ves como otros se arrancan la piel y todo lo que pueda protegerlos
y se salan las heridas,
porque algún hijo de puta les hizo creer alguna vez que eran culpables.
Vos lo sabés, pero cerrás los ojos
y seguís queriendo cruzar por el medio de la pared.
Puertas.
Ventanas.
Yo, que me abro descaradamente ignorando mis propias heridas
saladas
recientes
Yo, que quiero ser un rato,
una cerradura para espiar,
una llave de candado berreta;
algo,
mínimo.
Vos, seguis estallando
Rebalsando
Vaciar para llenar.
Pero volver a llenar alguna vez.
10/2/10
me quedo pensando...
ResponderEliminarhay puertas, ventanas, ojos cerrados y abrirse descaradamente y después ser cerradura... todo junto? todas las que somos?
hay desborde y estallar y rebalsar...
somos todo eso? somos adentro y afuera, lo incontenible y lo que sujeta. digo. no se...me sale medio cursi pero me quedo pensando. besos.
justamente, quizas debamos entender, que las cosas no son blancas o negras, sino blancas y negras, estamos compuestos de la totalidad, somos parte de la totalidad. todo el universo está dentro nuestro, somos microcosmos... y eso implica aceptar, aunque no entendamos, nuestras propias contradicciones...
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